Y esta vez no es el corazón.
Me escuecen los ojos. Me miran fijamente tus ojos de azabache desde el recuerdo. Y grito. Y me desgarro. Y se me rompe el alma contra las paredes de mi piel, llenas de pinchos cual armario de castigo. Todo ocurre dentro. Todo siempre ocurre dentro. No me muevo, no respiro. Sólo me escuecen los ojos, y nadie lo nota.
Y esta vez volveré a mentirte.
Me escuecen los ojos. Y, quizás en un parpadeo calmado, conseguiré acallar los últimos retazos de tus miradas. O no. Serás la cicatriz de mis sonrisas. No aparezcas más de madrugada, cubierto de sombras y lamentos, pidiendo auxilio desde la ventana. Eres todo azabache y todo alma.
Y esta vez vas a volverme loca.
No hay nada más escalofriante que la locura. Me ha dado miedo leerte y pensar que yo podría llegar a vivirla otra vez.
ResponderEliminarLos ojos son el espejo del alma.
ResponderEliminarapaga la luz
ResponderEliminary descansa
el pasado siempre está ahí,
ResponderEliminarpara volverte loca.